La Federación de Industria de USO reclama acción al Gobierno y la Generalitat para asegurar el futuro de Nissan Barcelona ante el probable cierre de plantas

Nissan Barcelona ha programado la vuelta a la producción para el 4 de mayo, sólo para una línea productiva y para hacer sólo el modelo pick up de la marca Mercedes Benz. Modelo que se tenía que dejar de fabricar en mayo y que es urgente por los compromisos que adquirieron con la marca Daimler. No hay retorno a la actividad para el resto.

Ayer, se mantuvo una reunión entre los sindicatos de Nissan Barcelona y la dirección, en la que se comunicó la decisión de que una vez se acabe de realizar esta producción, mandarán a casa a la plantilla por razones productivas hasta nuevo aviso.

Desde la Federación de Industria de USO reclamamos al Gobierno de España, al Govern de la Generalitat, así como a los diferentes ministerios y consejerías de industria de las diferentes administraciones que intercedan con la multinacional Nissan para conseguir mantener esta histórica empresa en España, dado que sería un duro golpe para sus trabajadores y sus familias y para el tejido industrial de nuestro país. Más de 25.000 familias entre trabajadores directos e indirectos se están jugando su puesto de trabajo.

Años de descenso en la producción de Nissan Barcelona

La Federación de Industria de USO está siendo testigo de las situaciones que atraviesan las plantas de Nissan en España, que no es nueva. Desde hace años, han ido bajando las producciones y eliminando la fabricación de los vehículos sin tener un sustituto.

A pesar de todo esto, el camino recorrido ha tenido un alto precio para la plantilla de Nissan, que ha asumido grandes esfuerzos cada vez que han sido requeridos por la compañía. Han sacrificando derechos laborales, mermas económicas, aumento de ritmos, recortes de descansos, y un sinfín de cosas más, sin que ello se tradujese nunca en una estabilidad. Cada año tocaba “salvar la fábrica”.

Incertidumbre en Nissan Barcelona por la crisis del coronavirus

La situación de incertidumbre generada por el covid-19, da la impresión de que va a ser aprovechada por la dirección de Nissan para, de una forma subterránea, tomar la decisión de cierre de la operación de la multinacional en España, con unas plantas al 25% de su capacidad productiva y con el director de Nissan Europa, Gianluca de Ficchy, manifestando meses atrás que a pesar de los esfuerzos, no eran rentables. Antes del verano se habrá decidido que hará Nissan con sus centros en España.

Esto fue la gota que colmó el vaso para el comité de empresa de todas las plantas de Nissan en Barcelona junto a los trabajadores decidieron tomar las calles para pedir un #FuturoParaNissanYA. Esas movilizaciones masivas estuvieron acompañadas por reuniones y contactos con las distintas instituciones del estado, Ministerios, Generalitat, Ayuntamientos, etc., para exponer claramente el problema y explicar el conflicto social e industrial que podría tener el cierre de la actividad de una empresa como Nissan.

Las movilizaciones hicieron que las administraciones tomaran partido en el conflicto. Este entendimiento cristalizó con un proyecto en el que participaron las administraciones tanto a nivel estatal como autonómico, los sindicatos, y la propia empresa a nivel local. Este proyecto se presentó a Nissan Japón a finales del mes de febrero del 2020.

Cuando la propuesta y toda reivindicación parecía que estaban empezando a mover la posibilidad de tener alguna esperanza, estalló la crisis sanitaria del coronavirus, el decreto de estado de alarma, el ERTE, y el confinamiento.

No fue fácil negociar el ERTE, ya que la dirección no se encontraba a gusto con la imposibilidad de poder despedir hasta pasados 6 meses después de levantar el expediente de regulación, la incertidumbre que hay no permite tener claro si podrían cumplir con la premisa y poderse ahorrar el dinero de las cotizaciones.

Por eso, lanzó una propuesta a la baja, ya contando con la penalización, que no gustó al comité, el cual no dudó en ponerlo en conocimiento del Departament de Treball. Finalmente se llegó al acuerdo en línea a las demás constructoras del auto.